exposicion de las cervezas de casimiro mahou

Nunca antes se me había ocurrido pensar en las similitudes entre el pan y la cerveza hasta que el sábado presencié el taller de elaboración de pan con cerveza, realizado por Panic y Casimiro Mahou con motivo de la celebración de la semana de la cerveza (Madrid Beer Week) en la capital.

El restaurante Dabbawala fue el lugar elegido. Allí, los asistentes pudimos conocer de primera mano los cuatro tipos de cervezas que la marca ha sacado en honor al fundador, Casimiro Mahou. Éste quiso unir las materias primas de su tierra, Francia, con la buena calidad del agua madrileña. La prosperidad del negocio no fue obra suya sino de sus hijos. Gracias a ello están al alcance de nuestras manos Amaniel, Maravillas, Marcenado y Jacometrezo, dos lagers -de fermentación baja-  y dos ales -de fermentación alta-.

Amaniel y Maravillas llamadas así en recuerdo, la primera, a la ubicación de la primigenia fábrica de Mahou en la capital, y la segunda, a la calle donde estuvo la fábrica de papel pintado que fundó Don Casimiro. Son cervezas de baja fermentación. Amaniel contiene 5,2º de alcohol y Maravillas es la más alcoholica de las cuatro, con 7º.

r elegido. Allí, los asistentes, pudimos conocer de primera mano los cuatro tipos de cervezas que la marca ha sacado en honor al fundador, Casimiro Mahou, quien quiso unir las materias primas de su tierra, en Francia, con la buena calidad del agua madrileña. La prosperidad del negocio no fue obra suya sino de sus hijos y gracias a ello están al alcance de nuestras manos Amaniel, Maravillas, Marcenado y Jacometrezo, dos lagers -de fermentación baja-  y dos ales -de fermentación alta-.
Marcenado y Jacometrezo, reciben su nombre, la primera, por la calle donde se construyó la maltería para la primitiva fábrica: Santa Cruz de Marcenado; y la segunda por la calle donde se ubicó el principal depósito y punto de venta y distribución que tuvo la fábrica. Marcenado es una cerveza de trigo, con 4,9º de alcohol. Es turbia porque no está filtrada y suave para quienes prefieran algo menos amargo. Por otro lado, Jacometrezo, con 6,4º de alcohol, es más seca. Es cobriza, debido a sus cuatro tipos de malta.
Parece que esta iniciativa de Mahou, por introducir la cerveza artesana y de mayor calidad en el mercado del gran público está gustando; al igual que el pan, pues cada vez se mira más por recuperar la calidad de lo artesano frente a lo industrial. En concreto estos dos productos podrían formar un estupendo maridaje, ¿No es así?
Javier Marca, maestro panadero, fue el encargado de liderar el taller. Se fue incluyendo la cerveza en el producto final de tres formas diferentes.

Cómo hacer pan de cerveza de tres formas diferentes

  • Componente prefermentado en un formato casi gelatinoso, con cerveza y agua
  • Cerveza Casimiro Mahou en estado líquido, directamente del envase
  • Granos de trigo bañados en cerveza.
Parece sencillo de contar, el proceso de elaboración, pero resulta algo tan desconocido en los tiempos que corren, que las preguntas se sucedieron durante toda una mañana. El tema: harina, agua y sal. A ello, sele pueden añadir diversos ingredientes para “customizar”.  Además de la harina -blanca e integral-, el agua -y la cerveza- y la sal, el pan llevaba masa madre, levadura, miel de caña y los componentes 1 y 3 que he explicado. ¿El resto del tiempo? Amasando, amasando y amasando.

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¿El producto final? Un exquisito pan rústico horneado en casa. Y sí, se puede comer todo el que se quiera porque “no pega”… ¡El alcohol se evapora en el horno! Sin duda una bonita iniciativa para recuperar la memoria -y el paladar- del pan.